Turnover
"Good Nature"
7.7
Si existe una característica a destacar en lo que ha realizado Turnover, a lo largo de su discografía, sería la cualidad de ser impredecibles. Desde su álbum debut (2013) "Magnolia", cimentando su base en el pop punk o en (2015) "Peripheral Vision", apostando por un shoegaze/dream pop e inclusive su nuevo álbum (2017) "Good Nature", el cual, quizás, no está tan distante de su antecesor pero, a pesar de ello, va a mostrar algunos cambios o una pequeña evolución.
En esta ocasión, el tercer álbum de Turnover: "Good Nature", será un álbum que vuelve aventurarse por pasajes que oscilan entre el shoegaze y el dream pop. Asimismo, rozando, por momentos, con cortes semi-psicodélicos. Aunque, quizás, marcando distancia con su antecesor, el cuál también está inmerso dentro de éste campo, la atmósfera principal no va a estar acompañada de la melancolía que enervaba y se respiraba en "Peripheral Vision".
Justamente, éste nuevo álbum va a destacar por tener elementos más frescos, más relajados e inclusive risueños. Probablemente, proyecten y busquen transmitir esas sensaciones que nos invade en las vacaciones de verano en donde tratamos de rehuir de las preocupaciones. Siento que ésto nos va a permitir sentir los detalles y los matices de cada instrumento que van acompañar a la voz de Austin Getz.
En lo personal, hay fragmentos del disco en los que me recuerdan a esa camada de bandas que surgieron a inicios de ésta década como, por ejemplo, "What Got in the Way" o "Breeze" con esa frescura y atmósfera similar a la del "Nocturne" de Wild Nothing. Inclusive, la eufórica y apacible "Curiosity", con su riff inicial, me da la sensación de escuchar la versión anti-drogas y menos densa de DIIV.
Obviamente, existen temas que van a estar alejados e indiferentes a cualquier referencia sonora y van a estar centrados en su propio sonido, en su propia huella como, por ejemplo, "Super Natural", introduciéndonos al disco con una melodía introspectiva o "Sunshine Type", con riffs suaves y sintetizadores en el fondo, los cuales, en conjunto, van a ser el soundtrack perfecto para esos días soleados de campo. Éstos temas, junto a "Butterfly Dream", van a reflejar el esfuerzo con el cuál buscaron recrear un ambiente exuberante, como lo dicta el art-work del álbum.
Sin embargo, habrá temas como "All That It Ever Was" o "Living Small", que van a destacar por salirse del molde poco exigente, y en los cuales se va a recurrir a sutiles cambios melódicos que les va a permitir marcar distancia ante los demás temas.
En resumen, "Good Nature" es un álbum que va a ser un escalón más en el camino que han emprendido y por el cual pretenden alcanzar el paraíso. En lo personal, no siento que sea el álbum más productivo del cuarteto de Virginia: Turnover. Aunque sí, quizás, el más elaborado y enriquecedor en experiencia y detalles sonoros. A pesar de ello, es una excelente opción a considerar para este próximo verano que está a la vuelta de la esquina.

