Es muy probable que Rainer María, no sólo desde sus inicios sino hasta el momento de su separación, siga gozando de cierta indiferencia por parte del público y la crítica. Inclusive hoy en día, marcando su regreso luego de once años con un álbum homónimo, "Rainer María", la expectativa ha sido minúscula y casi ha pasado desapercibida, si comparamos con el retorno de American Football, vecinos en Polyvinyl Records y contemporáneos del género.

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Sin embargo, ésto no reduce por ningún lado que el trayecto y repertorio del trío oriundo de Wisconsin, esté compuesto por álbumes simbólicos dentro del emo 90's. Probablemente, su segundo álbum (1999) "Look Now Look Again" sea el más prodigioso y valorado por los adeptos.

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En este regreso, siento que Rainer María busca marcar distancia de su último disco publicado: (2006) "Catastrophe Keeps Us Together" y tal vez, de aquella efervescencia juvenil que predominaba en la banda. No vamos a encontrar ese despliegue vehemente, ni desenfrenado. Ésto no va afectar en nada a lo que la banda va a lograr pero, evidentemente, tampoco debería sorprender si consideramos el tiempo de intervalo que hubo y los múltiples cambios que han desarrollado los integrantes. 

 

Por otro lado, siento que éste nuevo disco de Rainer María es, quizás, el mejor producido, más metódico y estructurado dentro de su repertorio. No sólo por la versatilidad de explorar matices como en "Blackbird". Sino por la forma en que el bajo creativo de De Marrais va adquirir protagonismo, a lo largo del disco, y como va a mantener, al frente de toda la ola de sonidos y distorsiones, su voz potente. Ésto va a resaltar en temas como "Broken Open Love", donde la línea de bajo y el trabajo de William en la batería, van a crear una atmósfera de pesadez. De éste mismo modo, sucede con "Possession" y "Lower Worlds". 

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Asimismo, "Forest Mattress" llega abanderada de la formidable voz de De Marrais, la cual junto a las voces secundarias de Fischer y la forma equilibrada de manejarse, entre lo pulido y lo áspero, de William van a permitir que emane esa esencia que definía a Rainer María en los 90's. Al igual, "Suicide and Lazy Eyes", la cual también va abarcar ésta fórmula pero manteniendo a flote un ambiente corrosivo debido a la distorsión que acompaña al tema en toda su duración. Ésto va a permitir resaltar lo dicho con anterioridad; es decir, la manera en que Rainer María ha construido un álbum más consistente, más pesado y sosegado. 

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En resumen, éste "S/T" (self-titled) de Rainer María, a pesar de no haber buscando la continuidad con sus trabajos anteriores, lo cual me parece totalmente coherente tras once años de ausencia, se van a mostrar ponderados ante los errores y las fallas del pasado, buscando construir la versión más sensata de ellos mismos.